El \"Hola Mundo\" que cambió todo
Recuerdo perfectamente esa tarde, sentado frente a mi vieja laptop. No tenía un título universitario en programación, ni siquiera sabía bien qué era un *backend* o un *frontend*. Solo tenía curiosidad y un montón de tutoriales de YouTube y plataformas online. Mi objetivo era simple: entender cómo diablos funcionaban las cosas en internet y, quizás, solo quizás, ganar algo de dinero con eso.
Empecé como muchos, con HTML y CSS. Era frustrante a veces, ver que algo no se alineaba o que un color no era exactamente el que querías. Había momentos en los que pensaba: \"Esto no es para mí, es demasiado complicado\". Pero la pequeña victoria de ver un `div` colocarse justo donde yo quería, o cambiar una fuente con una línea de código, se sentía increíblemente gratificante. Era como resolver un pequeño puzle digital cada vez.
De los tutoriales a los primeros proyectos (reales... o casi)
Después de un tiempo navegando entre cursos gratuitos y algún que otro bootcamp online que me endeudó un poquito (pero valió la pena), empecé a sentirme un poco más cómodo. Ya entendía la lógica básica de JavaScript, podía jugar con APIs sencillas. El siguiente paso natural fue buscar cómo aplicar todo eso.
Mis primeros \"proyectos\" fueron para amigos o familia. Una página web básica para el negocio de un tío, un pequeño script para automatizar algo aburrido. No cobraba nada, o casi nada. Lo hacía por la experiencia, por poner a prueba si realmente lo que aprendía servía para algo tangible. Y sí, servía. Cometía errores garrafales, claro que sí. Recuerdo una vez que borré sin querer media base de datos de prueba porque no entendí bien un comando. ¡Un susto! Pero de esos errores aprendes a ser más cuidadoso, a leer la documentación mil veces y a hacer *backups*.
¿Cómo di el salto a cobrar?
La parte más difícil no fue aprender a programar, sino ponerle precio a mi trabajo. ¿Cuánto vale mi tiempo? ¿Cuánto vale esta solución que estoy creando? Al principio, me infravaloraba muchísimo. Aceptaba proyectos por tarifas ridículas solo por empezar, por tener una experiencia real con un cliente que no fuera mi primo.
Mi primera clienta que no conocía de nada la encontré en una plataforma de freelancers. Era un proyecto pequeño, una landing page sencilla. Me pagó, si no me falla la memoria (esto fue hace unos 2 años y medio, por inicios de 2023), algo así como 150€. ¡Me sentí millonario! Pero más allá del dinero, fue la validación. Alguien externo, que no me hacía un favor, confió en mí y en lo que podía hacer con un teclado y un poco de código.
Lecciones aprendidas en el camino freelance
Ser autodidacta y freelance en tecnología es un camino lleno de aprendizajes. No solo técnicos, que nunca paran, sino también de negocio y personales. Aquí te dejo algunas cosas que he aprendido a base de ensayo y error:
- Define qué haces (y qué NO haces): Al principio quieres coger todo. Error. Es mejor especializarte en algo y hacerlo bien. Los clientes buscan expertos, no generalistas que hacen de todo un poco.
- No tengas miedo a decir no: Si un proyecto no te convence, el cliente no te da buena espina o la tarifa es demasiado baja, es mejor rechazarlo. Ahorras tiempo, energía y posibles dolores de cabeza.
- Comunícate, comunícate, comunícate: La mayoría de problemas con clientes vienen por falta de comunicación. Sé claro con los plazos, los entregables y el alcance del proyecto. Pregunta si tienes dudas.
- Valora tu tiempo: Investiga cuánto se cobra por servicios similares. No regales tu trabajo solo por empezar. Tu habilidad tiene un valor.
- La formación continua es clave: La tecnología cambia a una velocidad de vértigo. Lo que aprendiste hace un año puede estar obsoleto. Dedica tiempo a seguir aprendiendo, experimentando y mejorando.
No todo es color de rosa, claro. Hay semanas con mucho trabajo y otras con poco. Hay clientes increíbles y otros... no tanto. Tienes que ser disciplinado para gestionar tu tiempo sin un jefe directo, motivarte cuando las cosas se ponen difíciles y estar siempre buscando nuevas oportunidades.
Mi perspectiva hoy
Mirando hacia atrás, desde ese \"Hola Mundo\" inicial hasta hoy, donde ya vivo cómodamente de mis proyectos freelance, me doy cuenta de que el camino autodidacta fue posible gracias a la persistencia y a la increíble cantidad de recursos gratuitos (o de bajo coste) que hay online. No necesitas una carrera tradicional para entrar en este mundo.
Si estás empezando o pensando en dar el salto al freelance, mi consejo es: empieza. Haz pequeños proyectos, aprende de tus errores, construye un portafolio, y no tengas miedo a ofrecer tus servicios. La experiencia se gana haciendo. Y quién sabe, quizás tu \"Hola Mundo\" de hoy sea el inicio de tu propia historia freelance.
¿Y tú? ¿Estás en este camino? ¿Cuáles han sido tus mayores retos o aprendizajes? Me encantaría leer tu experiencia en los comentarios. 👇
